El príncipe Harry, duque de Sussex, ha llegado al alto tribunal británico en Londres para declarar en un juicio contra el grupo Mirror. El juicio se centra en alrededor de 140 artículos publicados entre 1996 y 2010 que supuestamente contenían información recopilada ilegalmente. El príncipe Harry ha denunciado la invasión de la prensa en su vida y el sufrimiento causado por los artículos sensacionalistas. Alega que estos artículos fueron una distracción en su crecimiento y causaron paranoia en sus relaciones personales.
La ausencia del príncipe Harry en la primera audiencia del juicio causó molestia al juez y a los abogados del grupo Mirror. Harry decidió quedarse en Los Ángeles para celebrar el segundo cumpleaños de su hija Lilibet en lugar de asistir a la corte. El juez consideró permitir más tiempo para el contrainterrogatorio del príncipe en los días siguientes.
Este caso ha atraído mucha atención debido a la participación del príncipe Harry y las revelaciones que se esperan. El juicio se centra en la presunta piratería telefónica y la invasión de la privacidad por parte de los medios de comunicación. El príncipe Harry se ha convertido en el primer miembro de la realeza en ser interrogado en un tribunal desde el escándalo del baccarat real de 1891.
Durante la primera audiencia, se revelaron detalles sobre la vida de Harry durante su infancia, incluyendo historias que mostraban signos de recopilación de información ilegal. Además, se mencionaron acusaciones sobre informes negativos de la relación entre Harry y su hermano, el príncipe William, y cómo la cobertura en los periódicos alimentó la desconfianza entre ellos.
El príncipe Harry ha emprendido una serie de juicios contra los principales tabloides británicos en un esfuerzo por abordar la invasión de privacidad y el trato injusto que él y su familia han experimentado. Su objetivo es reformar el panorama de los medios y proteger su privacidad y la de su familia.
En cuanto a la seguridad, el príncipe Harry ha viajado con su propio equipo de seguridad, ya que no ha obtenido custodia armada de Scotland Yard. Se ha informado que su casa en Montecito ha sido objeto de intentos de intrusión, lo que ha llevado a preocupaciones por su seguridad y la de su familia.
La reconciliación con su familia real se ha visto postergada, ya que actualmente existen tensiones y desacuerdos. El príncipe Carlos se encuentra de vacaciones en Transilvania, mientras que Frogmore Cottage, la casa que se les había regalado a los Sussex, ha sido confiscada.