Chicago.- El tratamiento contra el cáncer de pulmón ha descubierto una nueva vía que aumenta la supervivencia en aquellos pacientes en los que se ha detectado una mutación en el gen EGFR.
El estudio, impulsado por la farmacéutica AstraZeneca, fue presentado este domingo en Chicago, en el marco de la reunión anual de la Sociedad Estadounidense de Oncología Clínica (ASCO, por sus siglas en inglés).
El tratamiento con el fármaco osimertinib (Tagrisso®) después de la cirugía, según las conclusiones de ese ensayo llamado ADAURA, benefició a los pacientes con cáncer de pulmón de células no pequeñas (NSCLC) en estadio IB, II o IIIA. Participaron veintiséis países de Europa, América del Norte y del Sur y Asia-Pacífico.
De los 682 pacientes, con edades comprendidas entre 30 y 86 años, aproximadamente dos tercios eran mujeres. La edad media del grupo de osimertinib fue de 64 años y de 62 en los que recibieron placebo. Alrededor de dos tercios eran no fumadores y también alrededor de dos tercios eran asiáticos.
El estudio señala que cinco años después de la operación el riesgo de muerte en pacientes con cáncer de CPCNP en estadio IB-IIIA que fueron tratados con osimertinib fue un 51% menor que en los que recibieron placebo.
La tasa de supervivencia también fue del 88 % para el primer grupo y del 78 % entre los que siguieron con el placebo. El oncólogo Roy Herbst, autor del estudio y subdirector del Yale Cancer Center, recordó en su presentación en la sesión plenaria que el cáncer de pulmón es la principal causa mundial de muerte por cáncer.
Es responsable de 1,8 millones de muertes cada año. El NSCLC representa alrededor del 80% de todos los diagnósticos y alrededor del 30% de los pacientes pueden operarse.
La mutación de EGFR ocurre entre el 10 y el 50 % de los pacientes con NSCLC, según los datos de Herbst. A pesar del uso de quimioterapia después de la extirpación quirúrgica, las tasas de recaída en los estadios IB-IIIA son altas y aumentan en estadios posteriores.
Hasta ahora, la tasa de supervivencia a 5 años después de la operación en pacientes con cáncer de NSCLC que pueden operarse es del 65 al 75 % en el estadio IB, del 50 al 70 % en el estadio II y del 30 al 40 % en el estadio IIIA.
Esto hace que osimertinib gane tracción como un tratamiento estándar para esas personas y, según el vicepresidente ejecutivo de oncología de AstraZeneca, Dave Fredrickson, es la primera vez que la medicina de precisión ha tenido tanto éxito, mejorando la tasa de supervivencia.
“La medicina de precisión abre la oportunidad de tratar en una etapa más temprana. En el cáncer de pulmón esto es muy importante", explicó a Efe el directivo, quien destacó la importancia de que este tipo de cáncer se diagnostique de forma precoz.