Santo Domingo.- Las altas temperaturas pueden suponer un riesgo para la salud, actuando como desencadenante o favoreciendo el agravamiento o descompensación de patologías previas.
La ola de calor que afecta al país y que mantener un aumento de la sensación térmica entre 38 °C y 42 °C, Tiene un impacto directo en la salud de las personas, por lo que es necesario tomar medidas.
Mónica Rosario, Coordinador del Servicio de Cardiopatías Congénitas del Adulto de los Centros de Diagnóstico y Medicina Avanzada y Congresos Médicos y Telemedicina (Cedimat), dijo El dia que es necesario cambiar los hábitos día a día para prevenir efectos desastrosos que las altas temperaturas tienen sobre la salud.
“Tenemos que prepararnos mentalmente para que como van los dias los grados y suben toman precaucion”, dijo el cardiólogo.
El calor se ha asociado con un mayor riesgo de eventos cardiovasculares, explicó el experto.
En verano, el sistema circulatorio se ve afectado ya que cualquier situación en la que el cuerpo pierda más líquidos de lo habitual, como ocurre en este momento a causa de la sudoración, hace que el volumen de líquidos en el torrente sanguíneo disminuya.
“Con el aumento de la temperatura y el calor, el cuerpo trata de compensar para bajar la temperatura internamente”, dijo Rosario.
El cardiólogo informa que todo esto trae como consecuencia que el paciente sufra un vasodilatación de todo el sistema arterial, lo que conduce a una circulación más lenta. Y estas circunstancias pueden afectar especialmente a quienes las sufren enfermedades cardiovasculares.
"Por encima de los 28 grados es la temperatura que manejamos en el trópico"
Él el calor provoca deshidratacióny esto a su vez la hemoconcentración, que favorece los accidentes tromboembólicos.
Entrevista a Mónica Rosario, Coordinadora del Servicio de Cardiopatías Congénitas del Adulto del Cedimat.
El paciente además, puede sentirse mareado, con náuseas, taquicardia e incluso puede perder el conocimiento.
una buena hidratacion
En las últimas semanas la ola de calor extremo ha alcanzado un sensación térmica hasta 42 gradosRosario explica que para evitar que tenga efectos negativos en nuestra salud es necesario tomar medidas.
“La hidratación es fundamental. tanto para hacer ejercicio, como si estamos en casa. Con cada grado que aumenta la temperatura, el cuerpo pierde elementos necesarios.
recordé que Los electrolitos se pierden con la sudoración. que son vitales para el organismo y su funcionamiento, es así que a pesar de tener la sensación de que no tenemos sed, tienes que beber agua.
Lo más recomendable en la situación actual a juicio de la Dra. Rosario es consumir 2,5 o 3 litros al día de agua, bebidas que aporten electrolitos y no contienen cafeína.
Hizo un llamado a evitar las bebidas calientes y altas en calorías, pero también refrescos, cervezas y otras bebidas alcohólicas, con cafeína o muy azucaradas, Nada de alimentos salados o grasos. Además, en la medida de lo posible utilizar protector solar y estar en lugares frescos.
“Los electrolitos mantienen los vasos sanguíneos tonificados”
De la mano con una buena hidratación recomienda Rosario adaptar la dieta a las altas temperaturas.
Es necesario controlar la sal, las grasas y los azúcares, estaremos protegiéndonos correctamente de los riesgos asociados a las altas temperaturas.
También es importante que, en caso de tomar medicamentos diuréticos, pida al médico de base que ajuste la ingesta para que no se elimine el exceso de agua corporal en épocas de calor y humedad.
En cuanto a ejercicios al aire librellamado a tener cuidado con el tiempo y potenciarlos en las primeras horas de la mañana o de la noche que empieza a bajar las temperaturas, pero nunca deja de hacerlo.
Niños
En el caso particular de los niños, con especial atención a aquellos dependientes de cuidados por su edad o que padezcan alguna patología particular, es necesario redoblar la atención en cuanto a la hidratación se refiere.
“Con los niños todo depende de gustos y sabores, darles agua depende de si la quieren y si no somos conscientes no la toman”, explicó Rosario.
Aunque en comparación con los adultos, los niños se adaptan más lentamente a los cambios de calor ambiental y pueden no pensar en beber suficientes líquidos cuando juegan, hacen ejercicio o practican deportes.
Recomendó que se realicen dinámicas en las escuelas para que los niños se hidraten y ofrezcan a los padres opciones atractivas como el agua de coco.
