La inteligencia artificial (IA) sigue avanzando a pasos agigantados, y con ella, surgen nuevas aplicaciones que prometen revolucionar la forma en que interactuamos con la tecnología. Una de las últimas en irrumpir en el mercado es DeepSeek, una IA que ha escalado rápidamente en las listas de descargas. Sin embargo, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha lanzado una alerta sobre esta aplicación, advirtiendo que su uso podría implicar riesgos para la privacidad y protección de datos personales de los usuarios.
DeepSeek: un ascenso meteórico
La popularidad de DeepSeek ha crecido exponencialmente en poco tiempo, atrayendo a miles de usuarios que buscan experimentar con las capacidades de esta nueva inteligencia artificial. No obstante, esta rápida expansión ha generado inquietud entre las organizaciones de consumidores, quienes han comenzado a analizar el cumplimiento de DeepSeek con las normativas de protección de datos. La OCU, junto con otras organizaciones que forman parte de Euroconsumers, ha estado investigando a fondo el grado de cumplimiento del Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) por parte de DeepSeek y ha solicitado a las autoridades competentes que tomen medidas para garantizar la protección de los usuarios.
Incumplimiento del RGPD
El análisis realizado por la OCU ha revelado una conclusión preocupante: el procesamiento de datos de DeepSeek no cumple con los requisitos establecidos por el RGPD. Entre las deficiencias detectadas, se destacan el tratamiento internacional de datos personales sin las salvaguardias legales necesarias, la obtención inadecuada del consentimiento de los usuarios y, especialmente, las dudas sobre las medidas implementadas para verificar la edad de los menores y proteger sus datos sin el consentimiento paterno. Estas irregularidades ponen en riesgo la privacidad y seguridad de los usuarios de DeepSeek, especialmente los más jóvenes.
Otro aspecto que genera preocupación es la falta de transparencia en la política de privacidad de DeepSeek. La OCU ha señalado que dicha política no aclara si los datos de los usuarios se utilizan para la elaboración de perfiles o la toma de decisiones automatizadas. Esta opacidad dificulta que los usuarios puedan comprender cómo se utilizan sus datos y ejercer sus derechos de protección de datos de manera efectiva. La falta de información clara sobre el uso de los datos personales es una violación del principio de transparencia, uno de los pilares del RGPD.
Ante estos preocupantes hallazgos, la OCU ha instado a la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) a tomar cartas en el asunto. La organización ha solicitado a la AEPD que investigue a las empresas Hangzhou DeepSeek Artificial Intelligence y Beijing DeepSeek Artificial Intelligence, responsables del servicio que presta DeepSeek, y que adopte las medidas cautelares necesarias para salvaguardar la protección de datos de los usuarios españoles. Además, la OCU ha pedido a la AEPD que sancione a las empresas indicadas en caso de que se confirmen las irregularidades detectadas. La intervención de la AEPD es fundamental para garantizar el cumplimiento de la ley y proteger los derechos de los consumidores.
Riesgos para los menores
La falta de medidas efectivas para verificar la edad de los menores y obtener el consentimiento paterno es uno de los aspectos más preocupantes de la situación. Los niños y adolescentes son especialmente vulnerables a los riesgos que plantea la inteligencia artificial, como la manipulación, la exposición a contenidos inapropiados y la recopilación de datos personales sin su conocimiento o consentimiento. Es fundamental que las empresas que ofrecen servicios de IA implementen medidas robustas para proteger a los menores y garantizar que su privacidad sea respetada.
La alerta lanzada por la OCU pone de manifiesto la necesidad de que las empresas que desarrollan y comercializan aplicaciones de IA asuman su responsabilidad en materia de protección de datos. No basta con lanzar productos innovadores al mercado; es imprescindible garantizar que estos productos cumplan con las normativas de protección de datos y respeten la privacidad de los usuarios. La transparencia, la seguridad y el consentimiento informado deben ser pilares fundamentales en el desarrollo de la IA.
La protección de datos personales es un derecho fundamental reconocido por la legislación europea y española. Los usuarios tienen derecho a saber cómo se utilizan sus datos, a acceder a ellos, a rectificarlos, a oponerse a su tratamiento y a solicitar su supresión. Las empresas que operan en el mercado europeo deben respetar estos derechos y garantizar que sus prácticas de procesamiento de datos cumplan con los requisitos establecidos por el RGPD.
La alerta de la OCU sobre DeepSeek es una llamada de atención sobre los riesgos potenciales que plantea el uso de la inteligencia artificial en materia de protección de datos. Es fundamental que los usuarios sean prudentes al utilizar este tipo de aplicaciones y que se informen sobre sus políticas de privacidad y seguridad. Al mismo tiempo, es necesario que las autoridades reguladoras sigan vigilando de cerca el desarrollo de la IA y que tomen medidas para garantizar que se respeten los derechos de los consumidores y se proteja su privacidad. La innovación tecnológica no debe estar reñida con la protección de datos personales.