República Dominicana impulsa un sistema de compras públicas innovador para mejorar el acceso a medicamentos y tecnologías de última generación
República Dominicana ha dado un paso crucial hacia la modernización de su sistema de compras públicas en el sector salud. Gracias a nuevas modalidades de adquisición, el país busca garantizar que los ciudadanos tengan acceso oportuno a medicamentos y terapias innovadoras que pueden salvar vidas. Este avance se discutió en el “Foro Transformando la compra pública en bienestar para la gente”, celebrado en Santo Domingo, donde participaron actores clave como la Unión Europea, el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), entre otros.
Un enfoque hacia la transparencia y la eficiencia
La nueva Ley de Contrataciones Públicas 47-25, presentada durante el foro, marca un hito en la transparencia y eficiencia de las adquisiciones públicas. Carmen da Silva, representante de la Federación Centroamericana y del Caribe de Laboratorios Farmacéuticos (Fedefarma), destacó que esta legislación “abre un camino hacia procesos más transparentes y eficientes, beneficiando directamente a quienes necesitan terapias innovadoras que pueden ser la diferencia entre la vida y la muerte”.
Compras basadas en valor: un modelo que prioriza los resultados
Entre las innovaciones presentadas destacan los acuerdos de entrada gestionada (Managed Entry Agreements, MEA), un modelo que permite a los sistemas de salud adquirir medicamentos según el valor demostrado de las terapias y los resultados clínicos obtenidos por los pacientes. Este enfoque, ya implementado en países como Uruguay, Argentina, Colombia y Costa Rica, cambia la perspectiva tradicional: el precio deja de ser el único criterio de compra y se incorporan factores como la eficacia, calidad y costo-beneficio.
Gracias a este modelo, los pacientes con enfermedades crónicas o complejas podrían acceder más rápidamente a terapias avanzadas, al tiempo que se garantiza la sostenibilidad del sistema de salud.
Retos y oportunidades en el camino
Fernando Víquez, líder de Acceso de Fedefarma, señaló que uno de los mayores desafíos será la transición de un modelo centrado en el precio a uno que valore la innovación como un factor transformador. “La fragmentación del sistema de salud dominicano es un reto, pero con la unión del sector público, privado, asociaciones de pacientes, academia y expertos clínicos, el país podrá generar un impacto real y sostenible”, afirmó.
La innovación como inversión, no como gasto
La industria farmacéutica también resaltó los beneficios de las nuevas tecnologías, como las terapias subcutáneas, que reducen hospitalizaciones y consultas frecuentes, liberando capacidad en el sistema. Además, modelos como el pago por resultados, donde la remuneración depende de la efectividad comprobada, demuestran que la innovación no es un gasto, sino una inversión que genera ahorros sostenibles y beneficios tangibles para la sociedad.
Un futuro prometedor para la salud en República Dominicana
Con estos avances, República Dominicana se posiciona como un referente en la región en materia de compras públicas innovadoras. Al alinear su sistema de salud con estándares internacionales y con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, el país no solo mejora el acceso a tratamientos esenciales, sino que también garantiza un futuro más saludable y sostenible para todos sus ciudadanos.
