La dirigencia de Fundación Niños por una Esperanza denunció la gran deserción escolar de menores para trabajar para adultos, así como el narcotráfico en el barrio Santa Lucía de Cienfuegos, en la ciudad de Occidental Santiago.
El director de la organización, el pastor Pablo Ureña, aseguró que muchos niños eran utilizados como "mulas" para trasladar estupefacientes.
Hizo un llamado a las autoridades para frenar estos viciosos actos que afectan a las referidas comunidades.
Ureña también expresó su preocupación por la gran cantidad de niños y niñas que se dedican al trabajo de adultos.
Las principales actividades laborales realizadas por menores incluyen delivery, talleres, fábricas de metales y el vertedero de Rafey.
“Estamos viendo todos estos problemas con mucho dolor cuando vemos que las autoridades no entienden la gravedad del problema”, dijo el sacerdote.
Pablo Ureña habló sobre el tema en un acto con motivo del Día Mundial contra el Trabajo Infantil, que se celebra el 12 de junio de cada año.
Niños, niñas y adolescentes portaban pancartas que sugerían la explotación laboral de menores.