La ministra de Interior y Policía, Faride Raful, ha pedido disculpas públicas al dueño de una barbería intervenida por agentes de la Policía Nacional. Aunque el operativo no tenía como objetivo perjudicar el negocio, Raful reconoció que pudo causar incomodidad y afectar la actividad comercial.
Durante su participación en el Almuerzo del Grupo Corripio, la ministra explicó que se reunió con el comerciante para escuchar su versión de los hechos. El propietario expresó su preocupación por el impacto que la intervención tuvo en su negocio. Raful aseguró que estas situaciones deben servir para mejorar los protocolos y garantizar que las actuaciones policiales se realicen dentro de la ley y con respeto a los derechos de los ciudadanos.
La ministra también admitió que los operativos pueden generar tensiones, especialmente cuando no se explican de manera clara. Reafirmó el compromiso del Ministerio con una labor policial más humana, transparente y profesional. Además, destacó que se están revisando aspectos como la salud mental y los turnos de trabajo de los agentes para mejorar su desempeño.
En conclusión, Raful subrayó la importancia de aprender de estas experiencias para fortalecer la relación entre la policía y la ciudadanía, asegurando que las futuras intervenciones se lleven a cabo con mayor sensibilidad y respeto.