La Procuraduría investiga al dueño del Jet Set por presunto intento de ocultar bienes tras tragedia
La Procuraduría General de la República (PGR) ha iniciado una investigación contra Antonio Espaillat, propietario del Jet Set Club, por sospechas de intentar transferir bienes a su nombre para evadir responsabilidades tras el colapso del techo del local ocurrido el pasado abril. El incidente dejó 232 fallecidos y más de 180 heridos, entre ellos el famoso merenguero Rubby Pérez, quien perdió la vida en el lugar.
El Ministerio Público ha activado medidas cautelares contra las empresas Inversiones E y L SRL y Jet Set Club, además de revisar otras propiedades vinculadas a Espaillat. Estas acciones buscan proteger los derechos de las víctimas y asegurar posibles indemnizaciones. La PGR también presentó oposiciones formales para bloquear cualquier traspaso o venta irregular de bienes relacionados con el empresario.
Como parte del proceso investigativo se ha ordenado una auditoría exhaustiva sobre los registros corporativos, licencias de funcionamiento y pólizas de seguro relacionadas con las empresas del dueño del Jet Set. También se revisarán las condiciones estructurales del local para determinar si cumplía con las normativas vigentes antes del derrumbe.
Aunque Espaillat ha manifestado su disposición a colaborar y asegura que sus empresas facilitarán toda la documentación requerida, las autoridades mantienen un estricto control sobre cada paso del caso.
La tragedia ha generado un intenso debate sobre la seguridad en los espacios públicos y la responsabilidad legal frente a incidentes como este. La Ley Orgánica del Ministerio Público (133‑11) faculta a este organismo para garantizar que no haya impunidad en casos tan graves como este.
Este caso sigue bajo investigación mientras las familias afectadas esperan justicia tras uno de los peores desastres en República Dominicana.
