Mujeres alzan la voz en el Día Internacional de la Mujer: "Aún queda mucho por hacer"
En un emocionante Día Internacional de la Mujer, cientos de mujeres de diversos sectores sociales salieron a las calles para exigir mayores avances en derechos y oportunidades. Aunque reconocen algunos logros, las activistas insisten en que las desigualdades de género siguen siendo una realidad preocupante.
Brechas en política y embarazos adolescentes
Daris Estrella, una destacada activista, destacó las grandes brechas de género que persisten en la política y los altos índices de embarazos adolescentes. "Hemos avanzado, pero nos falta mucho. Solo hay tres senadoras de 32 y dos ministras de 24. Necesitamos ocupar espacios de poder para tomar decisiones que nos afectan directamente", afirmó. Además, señaló que el país tiene una de las tasas más altas de embarazos adolescentes en la región, un problema que requiere atención urgente.
Llamado al Estado para garantizar dignidad
Betania Figueroa, otra voz prominente, hizo un llamado al Estado para que implemente políticas públicas que garanticen el desarrollo y la dignidad de las mujeres. "Hoy no salimos a celebrar, sino a exponer nuestras necesidades. Desde el Congreso y el Gobierno deben generarse acciones concretas para transformar esta sociedad", declaró. Figueroa enfatizó que las mujeres siguen resistiendo y luchando por un futuro más justo.
Violencia de género: una urgencia
Yocarina Mancebo, una joven participante en la marcha realizada en el Altar de la Patria, habló sobre la necesidad de leyes más duras contra los feminicidios y la violencia de género. "Este día no es para celebrar, sino para recordar a quienes lucharon antes que nosotras. Pedimos a las autoridades que actúen con firmeza. Cada día mueren mujeres a manos de hombres, y esto no puede seguir pasando", expresó con indignación.
El camino sigue
Las mujeres presentes en las movilizaciones dejaron claro que su lucha no termina aquí. Continuarán trabajando por la igualdad de oportunidades, la seguridad y un futuro más justo para las próximas generaciones. Su mensaje es claro: aunque se han dado pasos importantes, la batalla por los derechos de las mujeres está lejos de terminar.
