De forma inesperada, el primer ministro italiano, Giorgia Meloni, y el canciller alemán, Olaf Scholz, se reunieron este jueves por primera vez en Roma y exhibieron armonía después de su encuentro. diez meses después que Italia se convirtió en el primer gran país europeo en caer en manos de la extrema derecha, algo que impactó a toda Europa, Italia y Alemania mostró coincidencias incluso lingüísticamente, cuando se habla de uno de los temas más espinosos dentro de la Unión Europea: la migración.
“Los desafios de la migración y los refugiados sólo podemos superarlos juntos en la Unión Europea”, ya que "descargar los problemas en otros son intentos fallidos”, dijo Scholz. El debate europeo no debe centrarse exclusivamente en “cómo aliviar la presión en los demás”, coincidió Meloni. "Alemania sabe que sin Italia, la frontera marítima europea, es difícil ponerse de acuerdo sobre unapolítica migratoria europea”, añadió el ultraconservador.
rehabilitar túnez
En este sentido, Meloni no desperdició la oportunidad de defender su última cruzada: rehabilitar el gobierno del polémico presidente tunecino Kais Said, muy criticado por su autoritarismo y es tonos racistas hacia los inmigrantes, ante la comunidad internacional. “Una desestabilización de Túnez habría graves repercusiones en el norte de África que también nos llegaría a nosotros”, advirtió.
Un argumento que pareció convencer al alemán. “Hemos discutido con el canciller la necesidad de un acuerdo para que Túnez obtenga financiamiento del Fondo Monetario Internacional (FMI). Tener una visión común. Para nosotros una estabilización de Túnez es prioridad”, argumentó la italiana sobre este país al que viajará este fin de semana junto a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. “Debemos fortalecer las relaciones con los países de origen y tránsito”, dijo el alemán, que también evitó cualquier tipo de encontronazo con su colega.
En el fondo también estaba Ucrania. "La agresión de Rusia ha cambió radicalmente el contexto de seguridad La unidad europea es un punto de fuerza. el presidente ruso Vladimir Putin No contó con ello, subestimó a Europa”, dijo Scholz. Asimismo, a nivel de suministro energético, esta cooperación es “muy importante” y “va a beneficiar a todos”, concluyó.