El presidente interino de Siria, Ahmed al Sharaa, ha justificado la ola de violencia en las zonas costeras del país, calificándola como un "desafío esperado". En los últimos cuatro días, más de 740 civiles han sido asesinados por las fuerzas de seguridad en una campaña militar que ha desatado el caos en la región. Al Sharaa llamó a la "unidad nacional" y aseguró que los sirios pueden "vivir juntos" sin temor por el futuro del país.
Las declaraciones del presidente interino llegan en medio de una violenta represión en las áreas mediterráneas de Siria, donde predomina la minoría alauí, la rama del islam chií a la que pertenece el clan de Bashar al Asad. Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, al menos 745 civiles alauís han sido asesinados "a sangre fría" en las provincias de Latakia, Tartús, Hama y Homs. Muchas de estas muertes han sido descritas como parte de una "masacre sectaria".
La violencia estalló el jueves cuando insurgentes alauís leales a Asad atacaron a las fuerzas de seguridad en Latakia. Esto desencadenó una campaña de represalia por parte del gobierno, que ha resultado en la mayor ola de violencia desde el derrocamiento de Asad en diciembre. Grupos de activistas han verificado numerosos videos que muestran ejecuciones sumarias, disparos a quemarropa, torturas y maltratos contra civiles desarmados.
El conflicto ha dejado un saldo total de 1.018 muertos en los últimos cuatro días, incluyendo 125 miembros de las fuerzas de seguridad y 148 combatientes leales a Asad. Aunque la nueva Administración siria no ha reconocido explícitamente estos actos, ha prometido tomar medidas legales contra quienes hayan cometido "excesos" o "actos de venganza" contra la población civil.
Las fuerzas gubernamentales están compuestas en su mayoría por excombatientes de Hayat Tahrir al Sham (HTS), una coalición islamista heredera del antiguo Frente Al Nusra, vinculado a Al Qaeda. Mientras la violencia continúa, las esperanzas de paz en Siria parecen cada vez más lejanas. La situación sigue siendo inestable y el número de víctimas podría aumentar en los próximos días.